miércoles, 24 de octubre de 2007

Miércoles, 24 de octubre de 2007

(San Antonio Claret)

Jesús dijo: “Mi gente, toda la humanidad ha sido hecha a Mi Imagen y ustedes valen más para Mí que los animales porque tienen alma y se les ha dado libre albedrío e intelecto. Tienen algunos comportamientos que son instintivos, pero su alma y su libre albedrío deben tener una intención en su corazón antes de realizar cualquier acción. Es este proceso de toma de decisiones lo que los hace responsables ante Mí por todas sus acciones. Si tienen una conciencia bien formada de lo que es correcto e incorrecto sin ninguna racionalización, entonces saben cuándo han hecho una buena obra o han cometido un pecado. Les he dado a todos Mis Diez Mandamientos como guía para vivir adecuadamente amándome y amando a su prójimo. Es la obediencia a Mi Voluntad y a Mis Mandamientos lo que es necesario para seguirme al cielo. Ser obedientes a Mí, a sus autoridades y a su consejero espiritual debería haberles sido enseñado desde su infancia. Les he dado Mi sacramento de la Reconciliación para confesar sus pecados y renovar Mi gracia en su alma. Algunos quieren siempre tener el control de sus vidas y hacer las cosas como les place, pero eso puede no estar en conformidad con Mis leyes. Cuando aceptan seguir Mi Voluntad en su consagración diaria, abandonan sus caminos para ser obedientes a Mis caminos. Ponerse en obediencia a su consejero espiritual significa que quieren renunciar a su control y entregárselo a Mí. Quiero que sean obedientes a Mí más por amor que solo por miedo al castigo. Cuando actúan por amor desde el corazón, estarán imitando más cómo viví en esta tierra. Cuando actúan por egoísmo, maldad o venganza, sus acciones podrían conducir a cosas pecaminosas sin amor en su corazón. Cuando viven en el amor de la obediencia, tendrán paz en su alma. Esta es la paz que les doy, y necesitan proteger esta paz de todas las tentaciones y deseos terrenales y demoníacos. Déjenme guiarlos en amor en todas sus acciones diarias de la voluntad, y estarán preparando su alma para estar conmigo en el cielo por toda la eternidad.”